Es por eso que en Bariloche se prepara un homenaje para los jóvenes que muerieron en la tragedia.
Este sábado 31 de agosto, a las 17:00 horas, la comunidad de Bariloche se reunirá en la Iglesia Catedral para conmemorar el 22° aniversario de la tragedia del cerro Ventana con la séptima edición del Concierto Homenaje Nueve Ángeles.
El concierto, de entrada libre y gratuita, promete ser una velada inolvidable, donde el romanticismo musical se entrelazará con el folclore nacional en un diálogo artístico que recorrerá obras de reconocidos compositores como Liszt, Gounod, Chopin, Rachmaninoff, Vallina, Falú y Ariel Ramírez, entre otros.
En esta ocasión especial, el escenario contará con la participación del Grupo de Expresión Corporal de La Llave y el Coro Municipal de Adultos de Bariloche, quienes sumarán su talento y emoción a la conmemoración.
Era una mañana tranquila de septiembre, el sol acariciaba las laderas del cerro Ventana en Bariloche, y un grupo de jóvenes estudiantes se preparaba para lo que prometía ser una emocionante aventura en la montaña.
Qué pasó aquel 1 de septiembre
Eran aproximadamente 70 alumnos, todos en su primer año del profesorado de Educación Física con especialización en actividades de montaña en el Centro Regional Universitario de Bariloche (CRUB) de la Universidad Nacional del Comahue. Estaban emocionados, pero ninguno sospechaba que ese día marcaría un capítulo oscuro en la historia de la montaña y la comunidad de Bariloche.
Su expedición estaba programada como parte de la materia «Caminatas de Montaña«. Partieron el sábado 31 de agosto de 2002 con la esperanza de aprender y experimentar la actividad. Como parte del itinerario, pernoctaron en el refugio «Villa Horrible».
Al día siguiente, alcanzaron la cumbre del cerro Ventana, un logro que debería haber sido motivo de celebración y orgullo. Pero lo que sucedió después cambió sus vidas para siempre.
El primero de septiembre, después de disfrutar de las vistas desde la cumbre ubicada a 1.910 metros sobre el nivel del mar, el grupo emprendió el regreso. Pero la montaña, a menudo impredecible y despiadada, tenía otros planes. Un sonido sordo y aterrador resonó en el aire, como un disparo distante. Fue el preludio de una tragedia inimaginable.
El Ventana, cubierto de nieve, se volvió traicionero en cuestión de segundos. Un alud descendió sobre ellos a más de mil metros de altura, atrapando a un grupo de estudiantes en su camino mortal. Rodaron montaña abajo, sin control, a través de la nieve y las rocas. El pánico y el caos reinaron mientras luchaban por sobrevivir en medio de la avalancha.
Las noticias de la tragedia se extendieron como un reguero de pólvora, y pronto, una operación de rescate masiva se puso en marcha. Cientos de personas, incluidos los propios estudiantes, se unieron en un esfuerzo desesperado por salvar vidas. Pero, a medida que avanzaba el día, la magnitud de la tragedia se hizo evidente.
Mario Sebastián Tapia, Antonio Humberto Díaz, Adrián Marcelo Mercado, Oscar Fabricio Vaccari, María Gimena López, Gimena Solange Padín, Roberto Arturo Montero, Martín Sebastián Lemos y Paolo Jesús Machello, estos nueve jóvenes, perdieron sus vidas en ese fatídico día. Sus sueños y aspiraciones se desvanecieron en la hermosa pero a veces cruel montaña.
Andy Lamuniére, el montañista que guiaba al grupo aquel trágico día, fue el único imputado en el trágico accidente. Aunque algunas familias lo eximieron de culpa, otras buscaron justicia a través del sistema legal.
El cerro Ventana, que alguna vez fue un lugar de belleza natural y aventura, se convirtió en un sitio de conmemoración y reflexión. Cada año, la comunidad educativa de la Universidad Nacional del Comahue en Bariloche se reúne para honrar la memoria de estos valientes estudiantes que pagaron el precio más alto por su pasión por la montaña.
El 1 de septiembre se convirtió en un día de recuerdo y reflexión, un día para recordar la importancia de la seguridad en la montaña y para rendir homenaje a aquellos que nunca regresaron.
Familiares e integrantes de la Comunidad CRUB se dirigieron hacia el Patio del Recuerdo donde dejaron ofrendas florales en el espacio que lleva los nombres de los fallecidos. Asimismo, se llevó a cabo una muestra fotográfica en la Pared Blanca y estudiantes realizaron actividades junto a docentes de la Carrera de Educación Física en el mini muro móvil de escalada del CRUB.
